lunes, 13 de octubre de 2014

Conspiranoicos: “La Conspiración”.

Hola, nuevamente aquí con una historia producto de mis fumadas continua de locura, trate hacerla de terror, pero salió peor que mi primer intento…

Lo mío no es el género de terror, lo mío es la locura, quise hacer una historia de un gato y termine haciendo algo muy extraño, lleno de mi incongruencia, similar a Conspiranoicos.


Espero les agrade como siempre perdura mi estilo con algo de mala ortografía, laberintos mentales, cuídense, ciao:D







La Conspiración.
Lo veo el hombre insiste en vigilarme… Creen que no lo noto, ellos son tan evidentes…

Y yo lo único que siento es lastima hacia ellos y un enorme ego inflado por tomarle tanta importancia a alguien como yo…

Tan pequeño e indefenso…

Mientras este periodista se lee otra revista sobre alienígenas…

Sobre control mental y un millón de conspiraciones evidentes que solo los ingenuos desconocen…

Un pequeño ronroneo me saca de mi lectura… Es aquella gata de rostro enojón dándome un poco de su amor sorpresivo, hipnotizándome…

Me pierdo en su ronroneo que comienza a dormirme lentamente….

El libro cae de mi cama…

Y yo me pierdo en un sueño…

Un ruido me saca de aquel sueño MOR repentinamente, descubro a mi gata sobre mi cuerpo, muy cerca de mi cara viéndome fijamente…

Con esos ojos misteriosos y un carácter no usual en ella…

Me espanto… Me levanto y prendo la luz…

La gata vuelve a su carácter usual y comienza a maullar y acercarse a mí para que la acaricie.

Olvidando mi susto… Para hipnotizarme nuevamente con su ternura, que me deja profundamente dormido…

Al siguiente día, realizo una investigación sobre el control que tiene el gobierno sobre el pueblo, lo redacto de una manera tan dulce para no enfadar a tiranos, mientras me tomo un café demasiado caliente que escalda mi lengua y me hace descubrir que ese mismo dolor que sentí con el café, es lo mismo que siento cuando me piden ser diplomático o hipócrita.

No cabe duda…

Digo en mi mente han pasado tantas décadas y seguimos igual… Me pregunto cuando avanzara la humanidad, mientras veo en ese diario otra nota de autoritarismo, de tortura a estudiantes indefensos queriendo cambiar lo incambiable.

Humanos sin escrúpulos controlando a otros humanos.

¿Extraterrestres?… ¿Alienígenas en nuestro planeta gobernándonos?… Jajaja, rio por dentro, aquí solo hay humanos con muchas tretas.

De pronto un pensamiento, cosquillea mi mente… ¿Y si fuera cierto?...

Vuelvo a reír, para contestarme que si fuera cierto, solo descubriríamos que no somos la única especie idiota de todo el universo.

Termino mi investigación, mi gata juega con un estambre…

Y yo lo veo a lo lejos, puedo ver su bondad, su inocencia, su misticismo algo majestuoso que ningún humano pusilánime podrá tener.

Entonces me llegan recuerdos de la noche anterior, como desperté misteriosamente y vi a la gata sobre mí, con una mirada que me intrigo.

Vuelvo a observarle con ese estambre y ya no lo veo igual….

Una idea un tanto alucinada y disparatada se mete en mi cabeza…Pienso que talvez algún día una especie nos dominara…

O que talvez ya nos ha dominado y no lo hemos notado…

Pienso que esa especie no se encuentra en otro planeta, si no aquí con nosotros, que es parte de nuestro planeta.

En eso salgo de mi pensamiento y me hayo con que el exceso de teorías me está volviendo paranoico, extremadamente paranoico.

Vuelvo a ver a mi gata y ahí esta esa bola de pelo, llena de ternura, de inocencia, de majestuosidad…

Salgo de casa directo a mi trabajo, a dejar aquella investigación y artículos ya realizados para que los publiquen, para que los revisen, para que me paguen por ella una gran mierda.

Pero seré feliz pues hago lo que me gusta.

Siempre me animo de esta manera….

En el fondo se tantas verdades que decirlas, no valdría la pena…

Si pudiera describir el periodismo en la actualidad, diría que se nos paga tan mal, para que no haya exceso de aquellos seres que llenarían de verdades lo que no les conviene a gobiernos autoritaristas.

Por eso estamos en decadencia, por eso siempre es lo mismo…

Por eso nos minimizan, por eso vivimos en un riesgo constante al ofrecer nuestro trabajo.

Y sin embargo siguen las universidades pintando de sueños nuestras mentes, formándonos, diciéndonos que la libertad de expresión existe…

Patrañas, siempre patrañas…

Al momento de salir pocos llegan a ejercer la profesión, otros se venden al mejor postor…

Todo está calculado para no decir la verdad, para sabernos manejar y qué mejor que la miseria.

Que el sistema... Que dividirnos con ideas de fracaso o éxito y millones de mentiras más.

Pienso esto, mientras conduzco mi auto de regreso a casa…

Olvide que no le he hablado a Carolina, aquella amante casual…

Que nuestra relación sentimental se resume en sexo nada más, sexo desestresante…

Luego de terminar, los dos nos vestimos y partimos cada quien a su casa…

Debería abrazarla, hablarle al siguiente día, decirnos frases cursis, llenarla de presentes, de palabrería barata con “Te amos hipócritas”.

Pero no lo hago y ella tampoco, en el fondo somos tan parecidos, los dos sabemos que el amor no existe y que nuestra relación es perfecta así.

Que ella no es la única y yo no soy el único en su vida.

Hay más mujeres y al final ella siempre será mi preferida, porque las otra desean que les mienta y yo soy tan honesto que no puedo mentirles para al final dejarlas heridas.

Regreso a mi casa solitaria, a mis treinta y tantos años en ese pequeño departamento frio con mi única compañía la huraña Deisy, mi divina gatita.

Le sirvo de comer y regreso a mi recamara a leer esos nuevos libros que he comprado con más secretos que me apasionan sobre lo que ocurre haya fuera…

Llenos de explicaciones y teorías que te invitan arrancarte el cabello de tantas atrocidades y malditas dudas sin respuestas.

En otro me describen los tipos de extraterrestres que existen y de los cuales nos han escondido todo…

Leo todas esas chorradas llenas de mentiras y verdades, que lo único que logran en mi es fascinarme y hacerme reír tanto.

Hace poco leí como decía un autor, que el hombre se había inventado hasta el humor para poder sobrevivir.

Y es que todo es tan extraño cuando se analiza, que es mejor no analizarlo tanto.

Y solo vivir la vida humana, con lo que uno considera importante.

Entre más se analiza e investiga, más vacíos nos encontramos…

Más sin respuestas, existencia y dudas infinitas.

Que no todos pueden soportarlo.

Sin embargo, sigo atado a esos libros, a esas chorradas, a esa tontería…

Y rio en la descripción de la raza extraterrestre humanoide, donde nos describen a un hombre caucásico digno de países europeos.

Vuelvo a reír, pues hasta en la invención de teorías extraterrestres nunca falta el racismo, el alabo a un tipo de belleza….

Me miro mi piel y pienso que yo nunca podría llegar a ser descendiente de un extraterrestre humanoide y suelto una carcajada.

En eso mi linda gata sube, empalagosamente se acerca a mí, obstruye mi libro, no quiere que siga leyendo, quiere que la acaricie, que le ponga atención es una vanidosa.

Empieza a maullar, logra su objetivo por un rato, dejo el libro y la acaricio…

Dejo de acariciarla y ella me mira fijamente con unos ojos enormes que me hipnotizan y que a pesar de estar cansado de acariciarla, me obliga de alguna manera a volver hacerlo.

Luego ronronea y me hace masaje, relajándome.

Termino dormido…

En mi sueño veo a Daisy…

Aquella gata me está hablando y me dice: ¡Rogelio!…

¡Rogelio!...

Me habla con una voz ronca y tierna como su maullido… Me sorprendo y le contesto en mi sueño…

-¿Qué quieres Daisy?, luego grito entusiasmado…

-¡Wow, hablas Daisy!

-Ella me dice que ella es la reina de un planeta lejano…

Y que ahora este es su planeta…

Me habla con una voz tan firme…

Que no sé qué contestarle…

-Luego lo hago y le contesto como si fuera su esclavo, obligado a recibir sus órdenes y cumplirlas…

-¿Y que desees que haga Daisy?

- Quiero que escribas de mi Rogelio…

Quiero que mi reino vuelva a ser parte de este mundo.

Quiero que nos salves de las garras de tu raza.

- De pronto mi gata Daisy, se convierte en una mujer sumamente atractiva y me besa…

- Y yo solo contesto que haré todo lo que desee.

Despierto, un tanto confundido, incrédulo… Veo acostada a mi lado a Daisy, totalmente dormida y roncando.

Me pregunto a mí mismo: ¿Qué me está pasando?...

Luego me contesto: Sé que debo hablarle a Carolina y dejar de mimar tanto a mi gata o leer tanta mierda conspirativa, que comienza a llenar mi subconsciente de alucinaciones extrañas.

Veo mi celular, son las 4am, es tardísimo como para hablarle…

Pero le hablo desesperado…

Me contesta y desesperado le digo…

¡Carolina necesito sexo!…

Luego el raciocinio regresa a mí y me entra una gran vergüenza, como puedo hablarle así, a esta hora como si ella fuera mi sexo servidora a mis horas…

Y recuerdo que la que me habla siempre para los encuentros es ella y nunca lo dice tan directo.

Ella hace una pausa, luego contesta…

- ¿Dónde estás?...

¿Estas borracho?…

-En eso quiero responderle borracho, no necesito estar borracho para querer sexo…

Pero le contesto que no, luego decido mentir algo que nunca hago para lograr mi objetivo.

-¡Te extraño Carolina!… Rápidamente descubro mi error, yo nunca he sido así, para contestarle…

-¿Puedo ir a tu casa o no?...

Ella habla más bajo para decirme…

- Recuerdas a mi pareja Rogelio, ya es una relación formal, por eso no te había hablado, lo siento mucho, pero sabes el parece que si me ama y yo sé que tú no sabes amar.

En eso suelto una carcajada por dentro y digo:

-No se amar, no se mentir como el tipo con el que ahora estas, que es distinto.

- Ok, Carolina una disculpa, pensé siempre que buscabas lo mismo que yo, ya sabes nada de ataduras, todo dicho como es sin mentiras…

- Vamos tu eres una mujer inteligente, los dos sabemos que eso no existe…

- Ella me contesta… Sabes Rogelio, no lose creo que quise creer eso solo contigo, ¿tu sabes por qué?

- Le contesto… ¡No, no lose!

- En realidad tu y yo somos tan diferentes que nunca funcionaria.

- Y él es tan divino que me hace creer en el amor y yo no quiero morir sola ya estoy vieja, disculpa pero nos comprendemos tan bien, que eso nunca pasara contigo…

- A ti te falta mucho para llegar a mi etapa, para aprender amar por completo, sin temor.

Cuando la escucho, imagino que le grito rogando de una manera desgarradora… ¡Carolina, por favor no me dejes!

Sabes que necesito tu sexo… ¡Noooooooo!

…. y luego muero….


-En cambio le contesto, tienes razón que seas feliz, me invitas a la boda, bye.

Luego cuelgo el teléfono.

Me quedo desolado, mirando el techo con la luz apagada…

Suspiro, pienso que me gustaba más cuando no hablaba.

Me levanto, prendo la luz, busco el periódico y le hablo a una sexo servidora.

Esta era la segunda vez en mi vida que le hablaría a una, la primera vez lo hice cuando me desvirginaron y eso fue más por obligación de mis amigos que por mi gusto.

Fue con una gorda vieja y horrible, que no me quedaron ganas de volver a recurrir a esos lugares, no lo necesitaba, digo era un hombre a la mejor no míster mundo, pero tenía mi encanto, mi belleza de piel canela, que no necesitaba pagar.

Solo que esta vez era diferente, tenía una especie de orgullo pisoteado que parecía como si me hubiera enamorado, pero yo sabía que no era nada de eso.

A la primera imagen que me agrado en el periódico, le hable y acorde la cita en un hotel, no quería que me fuera a robar nada.

Llegue ahí como si fuera mi primera vez, esperándola desesperadamente y con una gran pena…

Mientras pensaba, carajo porque no solo me hago una puñeta y ya.

Pero la adrenalina era interesante, toco alguien al cuarto de hotel…

Abro y me hallo con la sorpresa que no era la chica de la imagen, que era una mujer gorda y muy vieja…

De pronto la reconozco…

Era la misma mujer que me desvirgino, en ese momento la mire sorprendido, saque el dinero y le dije muchas gracias, pero ya vino otra persona, luego cerré la puerta agitado.

Estaba temblando… Tan sorprendido que me puse a gritar de horror…

Aaaahhhhhhh

Aaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhh

Aaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh.

Luego calle… ¡Como es que a su edad seguía viva!

Recordé como esa primera vez, en vez de pagar para que yo lo disfrutara, ella fue la que lo disfruto… Casi me había violado y hecho de mí su trapo, yo tuve que ceder llorando por dentro, sin poder decir nada, digo me había hecho hombre, no me podía quejar y tenía que salir sonriendo como mis otros amigos calientes que nos dimos de topes en ese congal de mala muerte.

Decidí regresar a mi casa, ver una película pornográfica y terminar como no quería, con mi única mano amiga.

Luego de sentirme satisfecho…

Volvió la nostalgia por Carolina… Sus estúpidas palabras atravesaban mi cabeza de una forma totalmente distinta.

Rompiendo algo dentro de mis entrañas… Haciéndome odiar mi vida, observar mi recamara y verla…

Tan pequeña y tan grande a la vez, llena de vacío…

Con un inquilino perdido en teorías conspirativas, en un trabajo mal remunerado y apasionante a la vez, con mucha existencia sin sentido…

Con un inquilino que no sabía amar y que talvez nunca iba aprender hacerlo, porque veía las circunstancias tan crudamente que era difícil engañar alguien o engañarme a mí mismo.

Después me quede totalmente dormido…

Volví a soñar a Daisy…

Ella me ordenaba…

Seguía insistiendo que escribiera algo sobre ella, que salvara a su especie de la mía…

Con una voz extraña…

Después vi a billones de gatos maullando y ella en medio sentada en su trono…

Todos los gatos junto a ella, decían: ¡Tu planeta ahora nos pertenece!…

¡Tú planeta ahora nos pertenece!…

¡Tú planeta ahora nos pertenece!…

Luego desperté y encima de mí estaba mi gata, aplastándome la garganta.

Asustado la avente…

Luego razone: ¡Que me pasa!…

Voltie a ver mi celular, cheque la hora….

Ya eran las 11am de un sábado…

Me levante, lave mi cara y mis dientes… Me vi en aquel espejo un poco más viejo que ayer, no comprendiendo mis sentimientos.

Ni mis inusuales sueños lleno de tontería, donde mi gata siempre era la protagonista.

Terminando, volví a esos libros, a esa computadora, a todas esas teorías llena de verdades enmascaradas con seres de otros planetas, donde toda su destrucción era tan humana, que era increíble creerlas…

Reforzaban la verdad: “Humanos controlando humanos por poder, por vacíos que no saciaban, para evadir o alimentar esa existencia que tampoco ellos comprendían y que habían perdido totalmente la esperanza de encontrarla que su único refugio fue jugar con los otros y teñirlo todo en negro, en maldad.”

Demasiada vida los había enloquecido y a la vez solo fue un instante…

Cerré aquella computadora, tome aquellos libros y salí al minipatio...  Vertí un poco de carbón a un asador y le prendí fuego a todos esos libros.

A todas esas revistas... Logrando una fogata que calmaba un poco el frió que calaba haya afuera y que a la vez, sentía quemarme más por dentro…

Harto de perderme en explicaciones que no resolvían mi debate interno y que solo existían para seguir evadiéndonos.

Para no vivir la vida….

Para juzgar a los otros de la injusticia humana, de esa injusticia que no terminaba y seguía, seguiría porque nadie hacia algo para detenerla, porque todos deseaban solo un dios o unos de esos alienígenas pintado de justicia y perfección lo que no sucedería.

La opresión en la sociedad y el país estaba a la orden del día, que al primer levantamiento de una minoría, lo eliminaban.

Entonces mire a mí alrededor…

Y descubrí que era cuestión de observar el mundo, sus formas y todo su maldito absurdo, para entender que un dios o naturaleza suicida nos creó con tanta imperfección para destruirse a sí misma.

Harta de tanta vida… Lo único que deseaba era morir y esa es la única explicación de toda esta tontería.

Por eso creo a mas malditos haya fuera, por eso hay pirañas pequeñas que acaban con todo en tan poco tiempo.

Mientras me perdía en la fogata del mini patio de mi departamento…

Mi gata se acercó a mí y comenzó ronronearme…

Tenía un rostro enojada que si no la conocieras pensaría que era una maldita, pero era la cosa más tierna y hermosa que solo en aquellos animales encontrarías el amor.

Vi consumirse aquellos libros, aquellas revistas junto a mi gata….

Regrese a mi cama no supe que hacer y decidí dormir…

Nuevamente mi gata Daisy, estaba en mi sueño…

En su silla, en su trono miles de sirvientes humanos la complacían…

En ese momento, ella me conto la verdad de su conspiración…

Sus palabras fueron:

Sabes Rogelio, me canse de ser solo un gato normal al cual ustedes lastimaban, al cual siempre quitaban de la mesa…

Al cual solo ponían atención cuando tenían ganas.

Me harte de vivir una injusticia y contemplarte a ti pensando que tú vivías también en una…

Y jamás me veías a mí…

A las otras mascotas y sus realidades…

A otros humanos con otras realidades peores que la tuya…

Decidí unir a más gatos y sin que lo supieran…. Por años comenzamos a controlarlos, todos ustedes a nuestra merced, sin que lo notaran.

Mi trato como gata mejoro, pero a un no está completado.

Hay otros que sufren, que maltratan haya fuera, que discriminan por su color…

Y si te dijera que hace mucho tiempo yo fui uno de los tuyos…

Después de vivir una vida humana, siempre siendo una egoísta con los otros…

Reencarne en un gato para ahora ver todos esos tratos revertidos hacia mí, pero yo no soy una gata normal nunca lo he sido.

No quise observar como alguien me castigaba por un pasado y decidí unir a los otros, para controlar juntos a todos los humanos.

Y hacerte ver al menos a ti, un poco de mi visión.

En ese momento abrió más sus ojos… Como tratándome decir con su gesto entre silencio, algo entre líneas…

“Deja de creer que eres el único que sufre, el único que busca respuestas, el único que está harto de todos”…

“No eres el único”…

Y aprende a vivir en la imperfección.

Luego se convirtió en una hermosa mujer y desapareció…

Desperté de aquel 
extraño sueño…

Ya estaba hastiado… Ya no había leído aquellos libros, ya no tenía sentido, ni motivo el soñar locuras…

¿Que deseaba que aprendiera?…

-¿Que todos sufren?…

-Lose…

-¿Que nada va cambiar?, también lo se…

-¿Que ame la imperfección?...Estoy inundado en ella

-¡Todo eso, ya lose!… En eso Daisy mi gata en la realidad, me voltio a ver, maulló…

Y siguió maullando y maullando… Su maullido se hizo cada vez más penetrante y molesto.

Me enloqueció…

Enloquecí, corrí a ella y comencé ahorcarla y gritar estas palabras

- Tu solo me enloqueces

- Tu solo juegas conmigo, siempre juegas conmigo…

- Jamás me has querido, ni sentiste algo por mí, solo te gusta jugar con mi mente…

- Solo deseas verme sufrir…

- Siempre querías todo a tu modo y manejarme de modo que el maldito en todos los aspectos terminaba siendo yo, el gran culpable.

- El único fracasado, algo no a su altura, pero sabes Carolina no lo soy…

-No lo soy… La única puta enferma eres tú…

- Me contabas de tu pareja, te quejabas de él, como si yo tuviera la obligación de darte consejos o escucharte, mientras también jugabas conmigo.

- ¿Y decís que yo no sé amar?… La única que nunca ha sabido amar eres tú…

- La única que disfruta pensando que tiene el control sobre mí, eres tú.

- Te has inventado una mentira y la sigues viviendo…

-Y sabes yo nunca seré como tu nueva pareja, nunca lo seré y no me importa…

- ¡Porque me gusta como soy!…

- ¡Porque yo no soy títere de nadie!…

- Y eres vieja, muy vieja y ese no es el problema… El problema es que estas tan podrida por dentro, que es un absurdo a verme enamorado de alguien tan perversa como tú.

En eso salí de mi trance…

Estaba ahorcando a mi almohada, por suerte mi gata huyo de mí…

Y descubrí que todo lo que estaba pasando era por ella…

Esa amante que solo jugo conmigo, que solo me tuvo cuando ella quería y yo caí…

Dure tanto tiempo a su lado, primero trabajando juntos, para luego convertirnos en amigos y después en amante a su disposición.

Donde yo creía disfrutarlo, para después entender que la repudiaba tanto…

Siempre me hizo sentir tan mal conmigo mismo…

Junto a ella solo sentía dolor…

Antes no hablábamos, luego comenzamos hablar más y ella no hacia otra cosa que herirme.

Lo más deplorable era yo… La equivocación perfecta…

En lo que nunca se fijaría y a la vez seguía persiguiendo…

Una onda de su maldito humo…

Y yo lo cambiaba a otra forma, formas en que este hombre quería creer que era feliz…

Que yo no sentía, que todo estaba bien…

Metido en la relación perfecta, donde quería engañarme y creer tener el control…

Donde nunca saldría herido y quedaba completamente destruido…

Pero, yo no lo notaba, aquella mujer había acabado con una parte de mi…

Siempre esperando sus sobras…

Sus insultos…

Entonces me evadía en miles de absurdos, para olvidar su veneno, para no desespérame porque ya no me llamaba…

No, yo no la amaba, era ego dolido…

No, yo no era perfecto, la imperfección me inundaba…

No, yo no… Luego me solté llorando, yo nunca la ame…

¡Yo tampoco te amé!…

Mi gata Daisy se acercó, comenzó a lamerme, para calmarme…

Mientras yo decía, en mi mente…

¡Yo solo me quise más a mí, que a ti!

Y ese fue el problema…

Tú querías pisotearme y yo no te deje…

Creíste que el no ser perfecto, te daba derecho a torturarme, a que no tuviera orgullo.

Por eso lo nuestro termino, porque al último deje de contestar tus llamadas y escuchar tu basura.

Y después de todo, tu forma de querer solo evidenciaba tu similitud a la verdadera conspiración.

Luego lo olvide y regrese tontamente, para que disfrutaras torturarme por última vez.

Esa es en realidad la única Conspiración en que yo me vi sumergido…

Creyendo que algo externo y maldito daría luz a mi vida… Cuando lo único que da luz a una vida, es uno mismo.


FIN



Historia creación de Cecy Gutiérrez y Excéntrica Zona Alterna, todos los derechos reservados.

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