jueves, 20 de noviembre de 2014

Indignación

El pasado lunes fui a ver la película “La dictadura perfecta “, producida y escrita por Luis Estrada… Parodia o sátira política, de la cual sinceramente nunca leí su sinopsis, pero de la que sabía hablaría de la decadencia de nuestro país, solo que pensé tontamente que se centrarían en echarle al presidente (cosa que paso muy poco y me decepciono).
Cuál fue mi sorpresa que la película hablaba de una cadena de televisión usando la estrategia llamada: “La caja china” (técnica muy usada en el periodismo de prensa y televisivo), que básicamente trata en tapar un escándalo importante, con otro escándalo no tan importante, pero lleno de polémica para que las personas dejen de enfocarse en ello.
 Y la película comienza tratando de ocultar un escándalo en la unión américana, con otro de un gobernador corrupto, para esto el gobernador (interpretado por el actor Damián Alcázar), no sabía de la estrategia y terminan quemando un poco su reputación.
Este para arreglarlo decide ir a la televisora y pagar sus servicios con el fin de que calle su escándalo, ahora con otro y mejoren su imagen… Después de pagar cantidad de dinero a la televisora, arregla su tropiezo con otro escándalo, que abarca un secuestro de unas gemelas y el cual termina favorablemente, luego de que las salven, para al final descubrir que el tipo que secuestraba a las gemelas, la misma televisora le pago para hacer el escándalo.
Así como toma final, vemos como el gobernador después de postularse para presidente y de ser limpiada su imagen, gana la presidencia y ahí acaba la película.
Disculpe si le conté la película, pero toda la película aunque exagerada, relata o evidencia lo que ya sabemos que pasa, más que una parodia fantástica, es una película narrando hechos verídicos pero queriendo esconderse tras un film.

A varios de lo que fuimos a verla, nos hizo salir con un mal sabor de boca, con esa cara de indignación, de enojo por que la película se tornaba desesperante y se alargaba; las risas a la mitad o ya a un cuarto de terminar la película, desaparecieron y solo se escuchaban a unos mocosos hijos de papi o pitucos riendo que para mí mala suerte, tocaron frente a nosotros.

Era como si esos engendros, más que dolerles la sarta de porquería que pasa en nuestro país les diera gracia, lo disfrutaran sin realmente sentirlo y como no lo iban a disfrutar, si gran parte de los padres de estos engendros, son personas que no les importan los demás o el daño que ocasionan a inocentes o al país, con tal de tragar dinero.

Me recordaron tanto a esos hijos de presidente, que dicen que el pueblo somos la prole o que van y salen a festejar y dicen que los desaparecidos de Ayotzinapa, no son importantes, eso ya es cinismo y ha sido siempre.

La película a pesar de alargarse y tener casi en todo su elenco actores de la televisora a la que parodia (cosa rara), logra evidenciar las tranzas de prensas vendidas o empresas de televisión corrupta.
Nos deja ver la estrategia mejor conocida para quitar un escándalo o apagarlo( caja china) y no dice quien según ellos ganara la próxima candidatura a la presidencia( que lo más seguro es que así sea), pero lo que me indigno de ella no fue todo eso que ya sabíamos, me dolió que detrás de todo su mensaje, se haya un amenaza con letras rojas y enormes que te dice no te reveles, la justicia no existe, ganaran los que paguen, lo amigos de lo que ya tienen poder y el que trate de cambiarlo morirá, porque el gobierno o el crimen organizado lo asesinara.

Y como siempre todo es pan y circo, hasta esa película que según se está burlando de los que manejan el país, termina burlándose del pueblo.
Mismo circo que ya se está viendo ahora, con el escándalo de la primera dama y su mansión ( si ya sabemos que siempre roban), lo único que han hecho es querer desviar la atención de ustedes espectadores, para que ya no se fijen en los desaparecidos, en los 43 normalista muertos o desaparecidos de Ayotzinapa 
Así como ahora el presidente dice que las protestas, son una forma de ataque hacia ellos (si como no), así como ellos mismos pagan a porros o a otros vándalos para que hagan desmadre y acusen a los que hacen marchas pacíficas... Y pasa siempre lo mismo porque vivimos en un país represivo, lleno de farsas, de rateros, de tiranos en el poder, de mafias que lo controlan.
Donde quieren hacer ver al bueno, como malo, cuando los que han hecho un desastre son ellos.
Entonces le recomiendo esta película, para que vea la indignación que se siente al verla, para que vea lo que hacen y ya están haciendo, para que simplemente se ahogue en la realidad de este mundo, de esta sociedad pelusa, a la cual la única esperanza de salvarla es…

Pero no pasara, me despido recordando las palabras de un amigo muy querido: “La gente siempre cae por su propio peso y donde tú crees ver felicidad y riqueza no siempre la hay”, cuídense, ciao:D


Imágenes tomadas de la red.

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